Agentes de la Policía Nacional han arrestado a un hombre que traía bajo engaños mujeres de Sudamérica para obligarlas después a ejercer la prostitución en dos clubes de alterne y piso de citas de Madrid. También ha sido detenida su pareja por haber participado con el detenido en una agresión sexual a una de las víctimas.
Según la información proporcionada por el cuerpo, las mujeres eran captadas en el continente sudamericano, donde se les ofrecía trabajo como camareras con condiciones muy ventajosas, pero posteriormente se les obligaba a ejercer la prostitución con el objetivo de saldar la deuda supuestamente adquirida por los costes del viaje a España.
Además, en ocasiones las mujeres eran agredidas sexualmente por su proxeneta tras la ingesta de alcohol y sustancias estupefacientes. En estos actos, también actuó la pareja del detenido, la cual fue también arrestada.
Durante la operación se efectuaron tres entradas y registros en los que se incautaron más de un centenar de fotocopias de pasaportes, cuadernos con anotaciones sobre los servicios de prostitución, así como más de 20.000 euros en efectivo y diversas drogas.
La investigación se inició a mediados de diciembre de 2022, cuando la Policía Nacional recibió una denuncia en la comisaria de Fuencarral-El Pardo en la que la víctima expuso hechos compatibles con la trata de seres humanos con fines de explotación sexual.
La víctima declaró que llegó desde Perú con la ayuda de un hombre que, tas prometerle un trabajo como camarera en bares de la capital y asumir los gastos del viaje, fue enviada a un club donde ejercía la prostitución contra su voluntad.
Más víctimas
Fruto de las investigaciones, se detectó que habría al menos dos víctimas más, confirmado que el presunto proxeneta traía mujeres de Sudamérica mediante diversas técnicas de captación, con la única intención de explotarlas sexualmente.
Los agentes pudieron averiguar que de la mitad de los benéficos que ellas percibían, tenían que pagar la deuda contraída por los gastos del viaje, así como 200 euros mensuales de alquiler de la habitación donde vivían. Además, las víctimas estaban sometidas a un severo control por parte del detenido.
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