El barrio de Chamberí cuenta, desde el pasado mes de octubre, con un nuevo vecino: un club que nos traslada a los antiguos cabarets de Paris de finales del siglo XIX y principios del XX. Si le gustan estos espectáculos, este antiguo local de conciertos se convierte en una propuesta de ocio que no le dejará indiferente.
Como salido de un cartel de Toulouse-Lautrec, de aire impresionista y ambientado en el famoso cabaret parisino Moulin Rouge, Rêver Club se instaló en Madrid hace unos meses. Ubicado en la calle Manuel Silvela (Chamberí), ha recuperado las noches de un antiguo local que permanecía cerrado. La historia que rodea la sala recupera la figura de Alberto Pestaña, que saltó a la fama gracias a su paso por el programa de talentos de Antena 3 y por ganar el festival de Eurovisión de la Canción de Benidorm, y su mujer Cristina. "El bar lo abrieron para que tuviesen un espacio donde cantar, similares a los que existen en Alemania o París", cuenta Hugo, propietario de la actual sala.

Don Alberto, fue el nombre elegido por Pestaña cuando lo creó en 1973 para disfrutar de la música. Los mejores solistas se daban cita aquí y entre las voces más impresionantes y melódicas, transitaron las noches durante más de 40 años. Pero el paso del tiempo, las edades avanzadas y las ganas de descansar de un negocio tan sacrificante trajeron el cierre del local. Hasta octubre. Unos meses antes, Hugo había viajado con su socio a Bruselas y descubrieron el exitoso cabaret Chez Maman, un local de copas donde el público disfruta de diferentes espectáculos transformistas durante la noche: "A mi socio y a mi nos llegó la inspiración en el viaje aunque lo cierto es que siempre hemos sentido devoción por este tipo de exhibiciones". Con la idea en la cabeza regresaron de su viaje dispuestos a encontrar un espacio en el que pudieran mostrar al público lo que es un auténtico cabaret. "Rêver Club significa club de sueños. Y eso es lo que ocurrió, conseguimos hacer realidad lo que siempre quisimos", recuerda.

En Rêver Club, la protagonista de todas las perfomances es su impresionante escalera. En ella, las drag queens juegan con el espacio para mostrar un espectáculo y una coreografía muy acorde a los antiguos cabarets.Shirley Stonyrock, Luna, Adri Takoi, Drag Sitting y Bianca Privilege son algunas de las artistas que descienden por los 24 peldaños. Un derroche de sensualidad y sofisticación que potencia, en Madrid, la magia de esos pequeños y "desgastados" locales parisinos.
130 metros cuadrados y un aforo cercano a las 100 personas dan cabida también al ciclo de grandes artistas desconocidos. Una oportunidad para ofrecer visibilidad a las nuevas promesas de la música: "La idea es que los artistas que no han tenido otras posibilidades encuentren aquí un escenario donde mostrar lo que saben hacer". Así, aderezado con un ambiente bohemio y cool, el público puede disfrutar de estas actuaciones los miércoles.
Los jueves es el turno de los Djs en Hoy pinchas Tú, donde los profesionales que comienzan en este mundo pueden dar rienda suelta a su música. Y para poner el broche de oro a los domingos, la música electro eclipsará la vida nocturna del club.
Decoración retro
Los trazos de Monet y los carteles parisinos de finales del XIX de Toulouse-Lautrec invaden las paredes de Rêver Club. Los sofás presentan un estilo retro junto con unas mesitas bajas. El club cuenta además con zonas reservadas, donde se crean momentos, ambientes y atmósferas distintas en las que disfrutar de los éxitos musicales de las décadas entre los años 60 y los 90, y las notas del piano que preside la sala.