La realidad es que un estilo de vida urbano puede tener sus partes positivas, pero por lo general, también conlleva una serie de patrones como el estar en contacto con el aire contaminado de la ciudad a diario, el depender de horarios restrictivos debido al tráfico o al transporte público, y la presencia constante de ruido.
Todas estas cosas acaban pasando factura en nuestros organismo, siendo particularmente reflejado en aspectos como la sequedad de nuestra piel, la fragilidad de nuestras uñas, las bolsas que aparecen bajo los ojos por el sueño, arrugas y demás.
No hay lugar a dudas, de que la mejor solución para esto es el cuidado constante y diario de nuestra piel mediante limpiezas y rutinas de exfoliación, por ejemplo. Sin embargo, muchas veces, este método no nos da los resultados que buscamos. Esto es debido a que la belleza y el cuidado solo son llevadas a su máximo exponente en un lugar, un centro de estética.
El centro de estética
Estos locales cuentan con profesionales cualificados con años de estudios sobre la piel y otras especialidades, que se encargan de asesorarnos sobre la mejor manera de eliminar esos vestigios del estrés o de la mala alimentación, como pueden ser una piel grasa, puntos negros, ojeras y otros tantos.
Una de las clínicas más renombradas es un centro de estética en Madrid, en el Retiro. En este centro se ofrecen tratamientos faciales y corporales como limpiezas de poros en profundidad, tratamientos antiedad, o incluso, tratamientos con mascarillas de oxígeno para que nuestra piel respire de nuevo y la concentración sanguínea sea estimulada, devolviendo el color y el brillo a nuestra cara.
Uno de los tratamientos corporales más populares es la mesoterapia corporal, que consiste en la micro-inyección superficial de una serie de principios activos que previenen la flacidez en nuestra piel.
El aspecto más importante de hacer una visita a este centro de estética es que saldremos de él con una profunda sensación de rejuvenecimiento y de belleza, lo cual nos otorgará un impulso de autoestima y de amor propio. Éstos son bastiones de la salud mental y mejoran notablemente la calidad de vida.
Trucos y secretos de belleza
Al visitar un centro de estética recibiremos también una serie de conocimientos y secretos de belleza (pincha aquí) para maximizar el efecto de nuestra rutina de cuidados. Es importante conocer bien los componentes de los productos que usamos, así como el mejor método a la hora de aplicarlos, e incluso, saber cómo encontrar productos naturales que ofrezcan las mismas ventajas por un precio reducido.
Un ejemplo bien conocido de esto son las incontables propiedades beneficiosas del pepino, que con su alto contenido en agua, ácido cafeico y antioxidantes, puede reducir notablemente la retención de agua que originan las ojeras y bolsas en primer lugar.
También existen numerosos aceites esenciales como el de manzanilla, que es ideal para tratar el acné, los eccemas o los sabañones producidos por el frío, dado que tiene propiedades antisépticas y antiinflamatorias que evitan la infección y la irritación cutánea.
Nuestra piel es un órgano principal del organismo, y es concretamente el órgano más grande de nuestro cuerpo, por lo que es natural que requiera de la misma atención y cuidados que le damos al resto de nuestro organismo.
Son vitales alimentos como los aguacates, que tienen Omega-9, las almendras con sus altas dosis de vitamina E, o las frutas del bosque, que son una gran ayuda a la hora de filtrar nuestra sangre. Una buena alimentación es clave a la hora de tener un buen aspecto, porque la belleza es, al fin y al cabo, una manifestación física de la salud.