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Usos de la marihuana que no conocías

jueves 23 de agosto de 2018, 12:19h

El cannabis procede de la planta del cáñamo, siendo una mezcla de hojas secas, flores, tallos y semillas de la misma. Es una sustancia psicotrópica, es decir, es capaz de producir efectos intensos en quien la consume, hasta el punto de poder causar cambios en la personalidad. En concreto, la sustancia química que es capaz de alterar la mente es el THC, el tetrahidrocannabinol. Hasta ahí lo que es comúnmente conocido.

Cada país legisla de una forma en torno al cannabis. En Europa es conocido el caso de Holanda, donde es esencialmente legal. En otros países, como España, su consumo ha sido despenalizado, en cuanto a que solo se persigue el cultivo de cannabis si tiene como fin producir drogar y traficar con ella. No sucede así cuando el objetivo es el autoconsumo, entre otros ejemplos.

Mucho se ha hablado del uso terapéutico del cannabis. Diversos estudios han venido a resaltar sus propiedades en el campo de la medicina, especialmente en lo que se refiere al tratamiento del dolor de origen neurológico, por sus efectos analgésicos. En este sentido, puede ser recomendable su uso cuando se padece esclerosis múltiple, artritis reumeatoide, cáncer, VIH o incluso dolor de cabeza.

Al margen de estos efectos, las aplicaciones terapeúticas del cannabis han demostrado su eficacia a la hora de tratar otras enfermedades como la epilepsia. El cannabinoides tiene efectos antielépticos, además de ayudar a potenciar las propiedades anticonvulsionantes de fármacos como la Fenitoína. Lógicamente, el uso terapéutico debe estar controlado por un profesional médico, pero fármacos como Sativex (con extracto de cannabis) o jueces que han absuelto a personas que usaban marihuana para calmar el color indican que se está avanzando.

Usos decorativos

Como hemos mencionado, la marihuana procede de la planta del cáñamo, cuyo nombre científico es Cannabis, pero es una variedad con un porcentaje mayor de THC. El cáñamo, en todo caso se usa también en la producción de fibras textiles, de semillas y aceites, celulosa, cosméticos… También a modo decorativo.

En el ámbito de la manicura, un sector en el que cada vez se innova más, hay una tendencia poco conocida llamada weed nails. En ella, las uñas son decoradas con trozos de planta de marihuana que se mezcla con esmalte en gel. Pueden mezclarse con tonos verdosos, con purpurina dorada o incluso con tonos suaves, dando un aspecto más elegante y sofisticado. El nail art es precisamente eso, un arte.

Incluso los críticos con la legalización de la marihuana sucumbirían ante la belleza natural de un bonsái de marihuana. Se trata de una planta ornamental de cuyo tronco salen ramas con las características hojas verdes y melladas de siete puntas, en forma de estrella. Conseguir un bonsái bonito, eso sí, no es nada fácil.

Los grow shops

Los grow shops son legales en cuanto a que sirven para vender productos relacionados con el cultivo de marihuana a quienes se dedican al autoconsumo lúdico, lo que en España, como decíamos, es legal. La proliferación de estos establecimientos ha sido también un revulsivo para el tráfico ilegal, ya que muchos consumidores de marihuana prefieren plantarla por sí mismos. Les resulta más barato y, además, se aseguran el conseguir un producto de calidad, siempre y cuando se trabaje bien la materia.

El cultivo de marihuana se había disparado en lugares como Vigo en 2015, según medios de comunicación como La Voz de Vigo y, en medio de este incremento, los grow shop se convierten en una negocio que puede convertirse en próspero. En una tienda de estas características se pueden encontrar armarios, lámparas especiales, fertilizantes o tierras indicadas especialmente para el cultivo de marihuana. Se trata de toda una ciencia, por lo que hay que empezar con una buena guía de cultivo de marihuana que se puede consultar siguiendo el enlace anterior.

Lo cierto es que al precio que está la marihuana en el mercado negro se pueden comprar semillas con las que iniciarse en la aventura. Eso sí, para empezar hay que considerar si el clima es adecuado para plantar en exterior (en una terraza, patio o azotea) o es mejor hacerlo en interior, lo que acarreará la inversión en equipamiento específico disponible en tu grow shop más cercano.

Desde el momento de hacerse con las semillas, que son diferentes según su composición, su genética, los días de floración que conllevan o los niveles de THC, hasta que maduren los cogollos, el proceso requiere de suma paciencia y de conocimientos específicos. Existen numerosas webs especializadas, además de las ya citadas tiendas físicas.