Puede que hubiese estado midiendo tiempos para hablar y callar. Siguió la verborrea en las coplillas de despedida a Don Carnal en el Entierro de la Sardina ( "Y he aquí el drama de la / que soñó con saciar su hambre, / alegre y confiada en la Villa en / la que ahora se halla fiambre"), ese discurso de 'dije pero no dije' que se está convirtiendo cada año en el termómetro del enfrentamiento entre alcalde y presidenta.
Después del discurso de Carnaval hubo cóctel y Ruiz-Gallardón charló con la prensa sobre el acto. Los periodistas le reprocharon que no hubiese respondido a las preguntas de la prensa local. El regidor explicó que la entrevista de Gabilondo es un entorno diferente al de la Junta de Gobierno. Uno es más distendido que otro, mucho más formal.
En la Junta de Gobierno de este jueves, la prensa comentaba las palabras del alcalde. Pocos se creían su argumentación. Algunos, con sorna, abogaban por llevar máscaras de Gabilondo al Ayuntamiento o servirle un cafelito al primer edil para que considerase la sala de prensa un sitio "más acogedor" en el que responder a sus preguntas sobre Esperanza Aguirre.
