El cantante Loquillo fue el encargado de abrir de nuevo las puertas del WiZink Center de Madrid este viernes 3 de julio con un concierto tras el cierre obligado por la pandemia de coronavirus.
El formato incluía el visionado por streaming y la asistencia presencial para un aforo limitado solo a 1.700 personas (de las 17.000 del aforo total).