Hasta el momento a los detenidos se les imputan nueve hechos delictivos cometidos en la Comunidad de Madrid. La investigación comenzó a finales del pasado mes de marzo cuando los agentes tuvieron conocimiento del robo de dos furgones de reparto de paquetería a la altura del kilómetro 19 de la carretera de Burgos en la que varios individuos cubiertos con pasamontañas amenazaron a los conductores con un arma de fuego y un hacha y les obligaron a bajarse de los vehículos, sustrayendo ambas furgonetas que contenían un total de 235 teléfonos móviles de alta gama.
Posteriormente los individuos repartieron la carga entre cuatro vehículos. Minutos después, varios indicativos policiales consiguieron localizar a estos individuos cuando circulaban en caravana por la carretera M-45. Los detenidos emprendieron la huida, por lo que se generó una persecución que culminó con la recuperación de un monovolúmen y parte de la mercancía robada.
Un robo inminente
Tras realizar varias gestiones con el fin de identificar a los individuos los agentes tuvieron conocimiento de que la banda iba a cometer un robo inminente en la localidad de Majadahonda. A finales del mes de mayo los investigados esperaban ocultos en el cuarto de contadores del lugar del inmueble con la intención de acceder a una óptica y a una tienda de telefonía mediante el procedimiento del "butrón". Finalmente la policía les sorprendió in fraganti y los agentes procedieron a su arresto.
Tras las detenciones los individuos han ingresado en prisión. La investigación ha sido llevada a cabo por agentes de la Brigada Provincial de Policía Judicial en colaboración con agentes de la Comisaría de Alcobendas – San Sebastián de los Reyes, todos ellos pertenecientes a la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
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