La Policía Municipal de Madrid ha intervenido casi 1.500 cosméticos y tintes no autorizados en un centro de estética clandestino del distrito de Usera que sólo tenía licencia para operar como comercio minorista de calzado, complementos y textil.
La intervención se produjo el pasado 28 de febrero cuando los agentes inspeccionaron el local, ubicado en la calle Marcelo Usera, y comprobaron que, más allá de las actividades para las que estaba autorizado, funcionaba como un comercio tanto mayorista como minorista de productos cosméticos y de peluquería, al tiempo que ofrecía servicios de estética, manicura, pedicura, 'microblanding' o corrección de cejas y micropigmentación, según han confirmado a Europa Press fuentes de la investigación.
Los policías precintaron hasta 1.467 artículos cosméticos que carecían del distintivo de homologación para la Unión Europea o del etiquetado pertinente, en algunos casos con pegatinas que traducían al español la composición del producto.
De ellos, 63 tenían una composición prohibida desde el pasado 1 de marzo e incluso había cremas anestésicas prohibidas por la Agencia Española del Medicamento. También se encontraron en el lugar una camilla y dos pistolas de micropigmentación no homologadas o cloramina líquida procedente de Colombia y caducada.
Tampoco contaba el lugar con áreas diferenciadas para la práctica de los servicios estéticos y la zona de ventas, no se disponían las medidas de higiene necesarias para este tipo de actividad, se vulneraba la legislación relativa a la gestión de residuos y el personal que realizaba esta labor no estaba vacunado contra la hepatitis y el tétanos como exige la normativa.
Por todo ello, los agentes levantaron actas por numerosas infracciones y precintaron las zonas de servicios no incluidos en la autorización comercial del local.