El expresidente regional y actual consejero de Transportes, Movilidad e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, ha enfrentado la crisis sanitaria del Covid-19 con la responsabilidad de gestionar uno de los posibles núcleos de contagio del virus dada la alta concentración de gente que se acumula día a día. El decreto del estado de alarma redujo hasta mínimos el número de pasajes en Metro de Madrid, lo que facilitó el mantenimiento de las distancias de seguridad entre viajeros y permitió la instalación de mecanismos tecnológicos que evitaran al máximo el contacto.
Sin embargo, pasadas dos fases en la desescalada y autorizado el movimiento de los ciudadanos por la región, uno de los principales pilares del funcionamiento de la Comunidad de Madrid continúa registrando cifras mínimas. Con un porcentaje del 34 por ciento de viajeros respecto a los datos del pasado año por estas fechas, Ángel Garrido debe ahora conseguir que los madrileños recuperen la confianza en la seguridad del transporte público y, también, cierta normalidad en su día a día.
Pregunta: Parece que la llegada de la Fase 2 ha empujado a Metro de Madrid a una situación muy cercana a la normalidad que conocíamos, pero aún quedan cosas por recuperar. ¿Va a volver esa antigua normalidad en Metro de Madrid o la Pandemia va a dejar cambios a largo plazo?
Respuesta: La intención es que se recupere la normalidad por completo. Hemos hecho una apuesta por el transporte público y hemos conseguido que se incremente su uso notablemente. Ahora tenemos que luchar para que no se estigmatice de ninguna manera y recuperar esos niveles, que en este momento están como en un 34 por ciento respecto a la anterior fase a la crisis, lo que hace ver que se va recuperando poco a poco.
Se puede decir que ha habido un incremento del uso del vehículo privado, que seguramente tendrá que ver con una cuestión de prevención en los primeros momentos de la desescalada, pero una vez impuesto el uso obligatorio de las mascarillas y otras medidas de seguridad se está viendo que es un transporte seguro. Va a ser un proceso lento, no será cuestión ni de semanas ni de meses, tendremos que esperar incluso hasta el año que viene para poder ver los mismos parámetros que antes de la Pandemia, pero ahí está nuestra lucha.
P: Más allá de las medidas de higiene y de protección sanitarias, ¿cuáles son las iniciativas que ha puesto en marcha la consejería para hacer frente al virus y al miedo que este provoca en la población en su uso del transporte público?
R: En primer lugar, incluso en momentos en los que hubo a penas un siete por ciento de usuarios respecto a antes de la crisis, siempre hemos mantenido un nivel de oferta muy sobredimensionado. Ahora tenemos el 95 por ciento de la oferta habitual para casi un 34 por ciento de viajeros, porque nosotros no hemos querido restringir la oferta pública en base al número de viajeros. Lo hemos hecho porque queremos en todo momento dar la sensación de tranquilidad, de mismas frecuencias pero una distancia entre viajeros mayor.
Por otro lado, hemos utilizado en todo lo que hemos podido la tecnología, así todas las puertas que se pueden abrir automáticamente lo hacen sin que el pasajero tenga que tocarlas. En el caso de las entradas a todos los accesos de Metro, siempre ha habido alguna que ha estado abierta, hemos señalizado los asientos cuando solo se podía usar uno de cada dos, hemos limitado el pago en efectivo, hemos librerado los espacios de detrás de los conductores de autobuses para que no haya contacto y hemos habilitado mecanismos de control de acceso a Metro para que no se produjeran acumulaciones de gente en los andenes... Hemos hecho chequeos continuos, minuto a minuto, para saber lo que ocurría en nuestro transporte público y evitar cualquier concentración de gente.

P: La desescalada ha conllevado cierto aumento en el uso del transporte privado, de hecho el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida ha pedido colaboración al Gobierno central y regional para ejecutar carriles bus VAO en las carreteras nacionales de acceso a la capital para incentivar el uso del transporte público. ¿Lo ven como una buena medida?
R: Es buena idea, de hecho lo hemos solicitado en algunas reuniones a nivel técnico con el Ministerio. Ya estamos trabajando en conjunto con el Ministerio y el Ayuntamiento en el carril bus VAO de la A2, que lleva otra marcha y es distinto, pero creo que aunque con carácter provisional se podrían abrir este tipo de carriles en todas los accesos a la capital. En este momento nos vendría muy bien para dar mayor suscripción al transporte público y que tenga más fluidez, rapidez, y para que se prime la alta ocupación de vehículos.
P: No hay duda de que la movilidad es un punto clave en la desescalada, y el delegado de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Borja Carabante, señalaba hace unos días que es el momento de “apostar por un transporte público más potente, por la intermodalidad y la integración, lo que implica que el uso de diferentes sistemas de transporte estén integrados en uno solo”. ¿Cómo valora la idea?
R: Siempre hemos ido de la mano en este tema, la EMT es uno de los socios y siempre seguimos las mismas directrices. Apostamos por la intermodalidad y de hecho lo hemos iniciado con una serie de medidas que vamos a potenciar, como los aparcamientos disuasorios con los que pretendemos que pueda haber una intermodalidad de transporte público pero también con el privado.
Se trata de conseguir la buena combinación de hacer un uso racional del transporte privado con un uso prioritario del transporte público. Obviamente, todo es mejorable, pero tenemos uno de los mejores Metro del mundo y una red de autobuses a la cabeza del transporte público en España y en Europa y ahora se trata de recuperar a todos los viajeros que teníamos y seguir con la dinámica de la intermodalidad, que es una de las claves.

P: Imagino que la crisis sanitaria y el estado de alarma han hecho que se retrasen las obras y planes de ampliación de Metro. ¿En qué porcentaje se han visto afectadas?
R: Lógicamente, por la crisis y porque se prohibió la continuación de ciertas obras, todo esto ha supuesto cierta demora. En Gran Vía, por ejemplo, hemos recuperado ya el trabajo, pero en esta y otras obras ciertamente habrá un retraso. En cualquier caso, nosotros tenemos la intención de seguir con todos aquellos proyectos que tenemos en mente hacer, como las tres grandes ampliaciones en Metro. No se prevé que se abandone ningún proyecto, ha habido un impás pero tiene que interpretarse como una parada, no un final.
P: En el caso particular de las obras de Gran Vía, cuyo fin es uno de los más esperados por los madrileños, ¿la fecha prevista para su apertura sigue siendo la misma o se retrasa? ¿Hay alguna novedad?
R: Siempre he dicho que en este caso es complicado aventurar fechas porque dependemos también de la Dirección General de Patrimonio, que es la que ha ido aventurando cómo y a qué ritmo se podían marcar las obras. En este caso, prima por encima de todo la recuperación de todos los restos que son parte de la historia de los madrileños, más vale ser lentos y conservar lo que es de todos que ir rápido y acabar con algo que luego no podemos recuperar. Por lo tanto, es complicado aventurar una fecha pero se ha hablado de terminarlas a principios del año que viene, aunque con el retraso que nos ha estipulado por ley por el estado de alarma también tendrá su efecto. A priori no tiene por qué haber más retrasos que ese, pero hay que ser prudente porque no solo depende de la consejería.

P: No sé hasta qué punto la crisis del Covid-19, con todo lo que ha supuesto, ha podido también perjudicar al plan del Gobierno de abrir el Metro 24 horas los fines de semana.
R: Por ahora no hemos tomado ninguna decisión al respecto, pero este parón de tantos días y la desescalada evidentemente afecta en cuanto a plazos de lo que queríamos hacer. No podemos recuperar tres meses por arte de magia, pero por ejemplo por ahora hemos podido recuperar la formación de los 45 maquinistas que se estaban formando para incorporarse, que ha tenido que ser on-line porque presencial era imposible, y cuando se haga así tendremos que hacer grupos para asegurar las distancias entre unos y otros. Milagros no vamos a poder hacer, pero intentaremos que se cumplan los plazos de este año.
P: El Plan para la Reactivación de la Comunidad de Madrid tras la crisis del COVID‐19 involucra a su consejería en cuanto a que está va a ser la encargada de llevar a cabo una estrategia de Inversión en Infraestructuras de Transporte Público. ¿Puede explicarme un poco más este punto?
R: Se trata fundamentalmente de las ampliaciones de las líneas de Metro. Con ellas lo que queremos es tratar de mejorar nuestra red de Metro, que a pesar de que hablamos de más de 300 estaciones y 300 kilómetros, creo que se pueden mejorar algunas conexiones de nuestra red de Metro a través de estas ampliaciones. No queremos demorar ni renunciar a ninguno de estos proyectos de ampliación de las líneas 3, 5 y 11 y para ello contaremos con una inversión muy importante, de 260 millones de euros, que estará destinada a la revitalización y mejorar de la movilidad sostenible y mejora de transporte público. Creo que es momento de que las administración apostemos por la inversión pública, como las empresas, pero una parte de la reactivación del país y de Madrid va a depender de que mantengamos el ritmo de inversión que teníamos antes de la Pandemia.

P: Según han valorado varios portavoces de la oposición, el Plan es “insuficiente”, y particularmente para el líder de la oposición, Ángel Gabilondo, la reconstrucción debería hacerse directamente en la Asamblea y en común. ¿Cómo lo valora esta idea de Gabilondo?
R: Respeto siempre la opinión de la oposición, lógicamente están para eso, para opinar y hacer una fiscalización de lo que hace el Gobierno. Sin embargo, creo que partir de un plan que presenta el Gobierno es algo útil a priori, para mi es más difícil partir de una hoja en blanco y reunirse todos para empezar a dialogar. Comenzar con una dinámica de trabajo sobre algo que ya está sobre la mesa me parece que es más sencillo. Por otro lado, casi por definición cualquier plan está al principio incompleto y se le pueden añadir más cosas, pero honestamente creo que todo el esfuerzo que se ha hecho por parte de las consejerías ha sido muy importante.
De todas formas, no me cierro absolutamente a nada, estamos abiertos en este plan y en otros a propuestas que sean viables y asumibles. Lo que sí le pediría a la oposición es que se vayan planteando un apoyo a unos nuevos presupuestos, porque nada de esto se puede hacer si no. Un primer punto de partida por parte de la oposición, ya que les hemos ofrecido una búsqueda de acuerdo y de consenso, puede ser que planteen una fórmula de apoyo a los presupuestos con la renuncia de algunas cosas que no sean congruentes con el Gobierno que está y que es el que ha elegido la mayoría de los madrileños. Creo que tiene que ser un quid pro quo, y lo digo a derechas y a izquierdas. Obviamente no voy a pretender que Más Madrid o Podemos apoyen unos presupuestos del Partido Popular y Ciudadanos, pero Vox y PSOE creo que pueden y deben hacer ese esfuerzo.
P: Habla de una búsqueda de diálogo por parte del Gobierno, pero existe la lectura de que Aguado forzó que se llevara a cabo reuniéndose con la oposición sin Isabel Díaz Ayuso. ¿Qué piesa de esto?
R: Creo que no se puede hacer de esto una lectura de crisis, por activa y por pasiva tanto Ciudadanos como Partido Popular hemos dejado claro que ni va a haber elecciones anticipadas ni tampoco moción de censura. Sigo reiterando que para mi la mejor opción que tienen la Comunidad de Madrid como Gobierno es la de Ciudadanos y Partido Popular, y estamos por ella, nuestro compromiso es por cuatro años y se va a cumplir. Otra cosa es que a lo largo de estos cuatro años de una Gobierno con dos partidos, cada uno de ellos no abogue por opciones distintas, menos en cosas que no entran dentro de lo pactado, de los puntos.
En materia de lo que es cooperación con el resto de partidos políticos, Ciudadanos siempre ha sido más coactivo a la búsqueda del consenso que el Partido Popular. Pero lo que ha ocurrido aquí es que Ciudadanos planteó una línea de trabajo, Partido Popular no lo vio con tanta claridad pero al final se han sumado también. Así que una vez que tenemos lo importante, que es que los dos queremos buscar un acuerdo, la fórmula da igual. Lo importante era que por lo menos hubiera una voluntad de acuerdo y que creáramos esa seña de identidad y de idiosincrasia propia de Ciudadanos, algo que me gusta porque siempre he tratado de ser una persona pactista y de principios moderados, por lo que creo que muy buena noticia para Madrid.

P: Sin querer quitarle verdad a lo que me comenta, en las últimas semanas estamos viendo un enfretamiento entre dos consejeros del mismo Gobierno pero de diferente partido, Enrique Ruiz Escudero (PP) y Alberto Reyero (Cs)...
R: Hablamos de dos personas que son compañeros de Gobierno, amigos y excelentes consejeros cada uno en su rama. Han sido y son consejerías muy complicadas en formato normal y excepcionalmente en una situación de crisis, por eso creo que hay que ser muy comprensivos con ellos en estos momentos y sobre todo si ha podido surgir alguna tensión. Seguramente se ha elevado el tono, que no es lo deseable pero a veces ocurre, pero en cualquier caso creo que el conjunto del Gobierno perseguía lo mismo, que era atender lo mejor posible a las personas mayores.
Lo que se ha determinado por parte de Sanidad es que hubo unos protocolos, que se enviaron por error en un principio y que luego se corrigieron y no se aplicaron, y en eso estamos. Simplemente, lo que el consejero de Políticas Sociales lo que manifestó es que de haberse aplicado, esos protocolos a él no le parecían oportunos y correctos. Que de ahí se haya sobredimensionado la polémica, seguramente. Que el Gobierno no haya acertado en la comunicación, pues puede que también. Pero en definitiva tanto el consejero de Políticas Sociales como el de Sanidad coinciden en lo esencial, que era hacer frente a esta crisis y tratar de ayudar, sobre todo a los mayores. Los errores existen.
P: Siendo que reconoce que se han cometido errores, ¿considera necesaria la realización de esa comisión de investigación sobre lo ocurrido en las residencias durante la crisis sanitaria?
R: Si, nos parece bien que haya esa comisión y que con criterios lo más técnicos posibles y lo menos políticos posibles se realicen cuantas averiguaciones se requieran. El Gobierno siempre parte de un principio de transparencia, pero creo que otros no tienen tanta. A nivel nacional, creo que la línea de trabajar y de buscar el acuerdo y el consenso no es la que tiene el vicepresidente Pablo Iglesias ni el presidente del Gobierno, por también creo que hay que pedir a los partidos políticos que se apliquen lo que piden para los demás. En todo caso por parte de Ciudadanos no va a haber ningún problema en que se haga, y creo que por parte del Partido Popular tampoco, pero espero reciprocidad a nivel nacional.

P: Esta misma semana el portavoz del Grupo Parlamentario al que pertenece, César Zafra, solicitó a la presidenta Ayuso que defendiera a todos sus consejeros por igual, sean o no de su partido. ¿Considera cierta la sensación de que hay una defensa más férrea hacia unos que hacia otros?
R: Confío en que no sea así. Inevitablemente cada uno pertenece a un grupo político y somos seres humanos, es inevitable que tengamos más sintonía o conocimiento de lo que hacen unos consejeros u otros. En cualquier caso, la presidenta confía en el buen hacer tanto del consejero de Políticas Sociales como del de Sanidad, y el vicepresidente igual. Creo que todos somos equitativos dentro del Gobierno y si en algún momento no lo somos, pues rectificamos, lo aclaramos y ya está, no pasa nada.
P: El próximo día 21 de junio se termina el estado de alarma y la responsabilidad de la desescalada recae por completo sobre el Gobierno regional. ¿Lo ve preparado para ello?
R: Totalmente, para empezar porque siendo que es una crisis mayoritariamente sanitaria, Madrid posee uno de los mejores sanitarios de toda España y del mundo, por lo que en ese punto estamos más que preparados. En el resto de cuestiones importantes, creo que tenemos una posición muy privilegiada. Por ejemplo, tenemos un sistema de transporte público a la cabeza de España y Europa, lo cual nos permite estar tranquilos en esta desescalada, que en el caso del Área que me compete se está haciendo con absoluta normalidad para la gravedad que ha tenido en todos los sectores.
P: Como expresidente, me gustaría saber cómo valora la labor de la presidenta Isabel Díaz Ayuso durante la gestión de la crisis. Sospecho que no ha echado de menos el cargo...
R: Desde luego, ha tenido que ser muy complicado. Es muy fácil opinar y criticar, pero hay que estar en los momentos difíciles para saber la dureza de ser presidente. Tienes responsabilidad y deber tomar decisiones que pueden ayudar más o menos a los ciudadanos, pero tienes que hacerlo. En general creo que el Gobierno y la presidenta han estado a la altura, sinceramente. No es sencillo afrontar una crisis, lo digo yo que me ha tocado alguna, aunque no de este nivel.
La política no es una profesión, pero requiere de profesionalidad y en esta crisis ha habido personas que han tenido mucho conocimiento de los temas y gran capacidad de responder. Al final un Gobierno no es un presidente y un vicepresidente, es un conjunto de todos y un equipo, y creo que el conjunto que forma el Consejo de Gobierno es un muy buen grupo.