Madrid Central ha reducido considerablemente la contaminación en el ámbito al que está circunscrito. Sin embargo, la polución no solo la generan los vehículos, sino que también -y en gran medida- contribuye a una peor calidad del aire la falta de eficiencia energética que padecen la mayoría de edificios de la ciudad.
Según los datos ofrecidos por la patronal de reformas ANDIMAC, el 80 por ciento de los inmuebles de la capital supera los veinte años de antigüedad y estos, por su falta de rehabilitación, emiten el 40 por ciento de las emisiones de gases contaminantes.
"Se incide en la contaminación de los coches pero se deja de lado la eficiencia energética de los edificios", explica Raúl Salgado. En este sentido, el portavoz de la patronal insiste "rejuvenecerlos" a través de la rehabilitación de las zonas comunes -lo que acarrea un ahorro anual medio de 1.000 euros- o el aprovechamiento de las azoteas como cubiertas ajardinadas.
Para ello, señala que las administraciones ponen a la disposición de los ciudadanos diversas líneas de ayudas como el Plan MAD-re del Ayuntamiento o el Plan Estatal de Vivienda, que denuncia que está "inoperativo y estático" por el ciclo electoral.
En este sentido, Salgado también señala la "rentabilidad económica" de un sector que está en auge -este año, las familias se gastarán 750 euros de media-, pues una reforma puede suponer que un piso alquilado se encarezca un 20 por ciento y uno vendido, hasta un 30.
Con todo, lo cierto es que estos motivos no suelen ser los elegidos por los madrileños para reformar sus casas. Tal y como se desprende del estudio 'Como en casa en ningún sitio', otro informe presentado por la patronal en la feria de Ifema Rehabilitar Madrid, el factor principal es la mejora estética del hogar, seguido de la búsqueda de más confort y el mantenimiento de los espacios.