Isabel Díaz Ayuso está en el punto de mira. En la actualidad, se encuentra en plenas negociaciones con Ciudadanos y con Vox para conseguir la Presidencia de la Comunidad de Madrid, pues los números dan para ello. Sin embargo, su futuro está en entredicho después de varias informaciones periodísticas que apuntan a que podría haber cometido en 2011 un delito de alzamiento de bienes que, eso sí, ya estaría prescrito al haber pasado más de cinco años.
Según publica Infolibre, la candidata popular y sucesora de Cristina Cifuentes aceptó la donación de un piso de sus padres situado en Chamberí y evitó así el embargo del mismo por parte de Avalmadrid, una empresa semipública con la que su padre habría contraído una deuda de más de 400.000 euros. En este sentido, esto podría convertirla en 'cooperadora necesaria', pues al estar el piso ya a su nombre, la compañía no pudo reclamarlo. Además, cabe destacar que Ayuso ocultó esta donación en su última declaración de bienes, donde tan solo luce un piso de nuda propiedad donde vive su madre.
La deuda, en entredicho
Esta información se completa con otra de El Confidencial, que contó hace unos días que Avalmadrid prestó, cuando la candidata estaba en el círculo de la entonces presidenta Esperanza Aguirre, casi medio millón de euros a su padre poniendo como aval una nave que apenas valía 26.000 -fuentes cercanas a Ayuso defienden que hay una tasación que eleva esa cantidad hasta los 213.000-.
El préstamo debía devolverse en tres años, pero la sociedad no lo hizo y un juzgado estableció que la cantidad reclamada ascendía ya a los 540.000. Una vez falleció el padre de Ayuso en 2014, la candidata renunció a la herencia y no se hizo cargo cargo de la misma. Avalmadrid terminó quedándose con la finca, aunque la subasta quedó desierta. Por su parte, el equipo de la candidata ha aclarado a Madridiario que Ayuso ni tuvo ni tiene "ningún tipo de vinculación con las empresas de su familia, nunca ha participado de su gestión y nunca ha percibido ingreso alguno de las mismas".