Madridiario recopila las principales escenas rodadas en la Gran Vía madrileña, que este viernes comienza su gran transformación.
La principal arteria de Madrid ya es historia. Al menos, tal y como la conocemos, puesto que este viernes entra en vigor el dispositivo navideño del Ayuntamiento de Madrid que le quita espacio al coche para dárselo al peatón. Así, una vez finalizada la Navidad, la Gran Vía comenzará su transformación que finalizará a lo largo del año que viene.
Por eso, Madridiario quiere dedicarle un adiós especial a esta vía recopilando algunas de las escenas de cine míticas rodadas en ella hasta ahora.
El último caballo (1950)
Escrita, dirigida y producida por Edgar Nevilla y protagonizada por Fernando Fernán Gómez, el filme empieza con unas imágenes que son las que quiere evitar a toda costa el Ayuntamiento: una Gran Vía sumida en un caos total de tráfico. La película es un retrato irónico de la sociedad de una España sumida en el franquismo.
Manolo, guardia urbano (1956)
Manolo que, como indica el título, es guardia urbano, va a tener un hijo biológico después de 20 años de matrimonio que despertará los celos de Paloma, su primogénita adoptiva. Dirigida por Rafael J. Salvia, la película muestra la Gran Vía porque el protagonista trabaja en la Cibeles.
El crack (1981)
Apenas quedan cines y teatros, porque ahora (casi) todos los establecimientos son tiendas pero, por lo demás, no ha cambiado mucho la Gran Vía desde que el cineasta español José Luis Garci decidiera rodar El crack, una historia que cuenta la lucha de un detective privado al investigar la fuga de una menor y que recorre la principal arteria madrileña comparándola con Nueva York.
El día de la bestia (1995)
Un jovencísimo Álex de la Iglesia se puso al volante de una película que, sin preverlo, catapultó a la fama a Santiago Segura y Álex Angulo y provocó el salto a nivel nacional de grupos como Soziedad Alkohólica o Def Con Dos.
La escena más recordada de la cinta, galardonada con seis premios Goya, es aquella en la que los tres protagonistas (un cura obsesionado con hacer el mal, un heavy y un famoso presentador de un programa de ciencias ocultas) se suben al anuncio luminoso de Schweppes (que sigue presidendo la Gran Vía) al escapar por la ventana de la habitación en la que se encontraban.
Abre los ojos (1997)
En la memoria de todos los madrileños está todavía la imagen más famosa de la laureada película Abre los ojos, la segunda de la filmografía de Alejandro Amenábar. En ella, César (interpretado por Eduardo Noriega) pasea por una Gran Vía 'muy verde' y totalmente vacía.
Como contó Emiliano Otegui, integrante del equipo de producción de la cinta, al diario ABC, la escena fue rodada en el puente de la Virgen de la Paloma de 1996, aprovechando la huída de los ciudadanos de la capital en esas fechas aunque casi no puede llevarse a cabo porque la hora del permiso del Ayuntamiento era "absurda" -de las 4 de la mañana hasta las 8- y tuvieron que esperar casi 120 minutos más.
20 centímetros (2005)
Una Gran Vía de ensueño al más puro estilo La La Land, con música y barrenderos cantando y bailando en la puerta del Edificio Telefónica y en mitad de la carretera. Así comienza 20 centímetros, una película dirigida por Ramón Salazar, que cuenta la historia de Adolfo, un hombre que nació con 20 centímetros de pene y sentimiento de mujer.
El Bar (2017)
Blanca Suarez, en sujetador y con un abrigo de piel, por encima pasea por la Gran Vía en la última escena de la "mejor película", según él, que ha rodado Álex de la Iglesia, un fan de la principal calle de Madrid.
El Bar, ambientado en un local de la Calle del Pez, cuenta la historia de un grupo de personas totalmente heterogéneo que se convierte en una amenaza para la salud pública.
Pues será una Gran Vía más sana, más espaciosa, igual de larga y espectacular, con lo cual se podrán seguir filmando películas con imágenes igual de bonitas. Avancemos en nuestra sociedad respetando el mundo...no pisoteandolo por nuestros intereses urbanitas, de comodidad y egoísmo...