El final del 15-M feminista que acampa en la Puerta del Sol se alarga. En un principio, la autorización con la que contaba la acampada para permanecer en la céntrica plaza finalizaba el pasado viernes 31 de agosto a las diez de la noche pero, a día de hoy, siguen allí.
Y es que, tras varios intentos de desalojo por parte de la Policía denunciados a través de Twitter, han conseguido que el Ayuntamiento de Madrid amplíe su licencia en las mismas condiciones con las que contaban: en el punto informativo sobre violencia de género e igualdad tienen permiso para instalar tres carpas, dos mesas y 20 sillas.
Así las cosas, las feministas podrán habitar los alrededores de la estatua de Carlos III hasta el próximo 22 de septiembre, cuando se cumplen tres meses de su llegada después de una multitudinaria manifestación contra la libertad provisional de La Manada. Con este movimiento, ambas partes podrán reflexionar sobre sus, hasta ahora, distanciadas posturas.
Cruce de acusaciones
Como ya ha explicado este digital en anteriores informaciones, la lucha se sitúa entre el tutelaje del Consistorio o no. Antes de renovar la licencia, el Ayuntamiento propuso darles un espacio para que continuasen con su labor fuera de Sol y con un horario restringido, una oferta que no sentó bien en las bases de la Acampada Feminista, que contestó con duras acusaciones.
Mediante un comunicado, explicaron que su actividad permanente es "necesaria" y no está garantizada por el Estado, por lo que no podían aceptar una restricción que limitase su función durante la noche, cuando más denuncias dicen recibir.
De la misma forma, también denunciaban que la licencia del Ayuntamiento se limitase a punto de información después de "prometerles" el suministro de los recursos necesarios para ejercer como punto morado: agua, papeleras o un baño portátil. Elementos que aún no se les ha dado y que, con el permiso actual, tampoco podrán albergar.