Este martes comienza el juicio del caso Madrid Arena, en el que fallecieron cinco jóvenes, el 1 de noviembre de 2012. Madridiario ofrece las claves del juicio más importante del año en Madrid.
Los hechos.
- El coliseo Madrid Arena, propiedad de la empresa municipal Madrid Espacios y Congresos, fue arrendado por la promotora de eventos DivierTT, propiedad de Miguel Ángel Flores -un conocido empresario de la noche madrileña- durante la noche del 31 de octubre y el 1 de noviembre, para celebrar la macrofiesta 'Thriller Music Park', con la actuación estelar del DJ Steve Aoki. Posteriormente, se conoció que Flores no podía contratar con la administración al poseer deudas con la Seguridad Social.
- El espectáculo fue un éxito y las ventas de entradas se dispararon. Según los distintos recuentos, por imprenta se encargaron 17.500 billetes, por Internet se vendieron 5.335, en las urnas (incluidas las que ocultó en otra nave Flores y que se descubrieron posteriormente) se hallaron 16.800, y los cálculos periciales estimaron el aforo en más de 23.000. En la licencia que solicitó Miguel Ángel Flores al Ayuntamiento, avisó que asistirían 7.000 espectadores, aunque admitió inicialmente que había vendido 9.600. Madrid Arena tenía un aforo máximo de 10.620 personas. Según se pudo saber más tarde, la empresa encargada del control interior del evento, Kontrol 34, no realizó procedimientos sistemáticos de control y sus empleados eran solo auxiliares.
- En los alrededores del recinto se formó un macrobotellón de más de 3.000 personas, a pesar de que Madrid Espacios y Congresos tenía contratada a la empresa Seguriber para evitar que entrasen en el recinto menores, alcohol y drogas. Esta empresa había realizado un plan de seguridad que no fue revisado, ni aplicado. El mando de la Policía Municipal consideró que se trataba de un evento menor y destinó solo 30 agentes a la zona, sin establecer un dispositivo previo. Cuando quisieron reaccionar, se había desatado el caos. Ni DivierTT, ni el Ayuntamiento avisaron a los bomberos, ni al Samur, de la celebración del evento.
- En el momento en el que se anunció el espectáculo de Aoki, la gente se desplazó en masa hacia la pista de baile en el nivel cero del coliseo, sin que las medidas de control del tráfico de personas hiciesen nada por evitar una superpoblación en una sola de las plantas. Desde la calle, los jóvenes que hacían botellón entraron en el recinto, mayoritariamente, a través de un portón de carga no autorizado para el paso de personas. La saturación se trasladó a los pasillos. Entre las 03.35 y las 03.55 horas de la madrugada, en uno de los ocho vomitorios del recinto (cinco de ellos estaban cerrados por la organización del evento), se produjo una confluencia humana que provocó avalanchas, mientras las puertas de salida de emergencias permanecieron cerradas y los servicios de seguridad impidieron el paso por las únicas zonas abiertas. El encargado de las cámaras de seguridad no avisó del problema, a pesar de tener visión directa del suceso.
- Cinco jóvenes, entre ellas una menor de edad, resultaron aplastadas y dieciséis gravemente lesionadas en el suceso. Tres de las chicas más afectadas fueron trasladadas al botiquín, donde ejercía el servicio de enfermería, sin contrato formal y en precarias condiciones materiales, el antiguo concejal municipal Simón Viñals, de 77 años, médico de profesión. Le acompañaba su hijo, Carlos Viñals, también médico y funcionario municipal, y dos ATS. El ex edil consideró que las chicas estaban muertas, cuando estaban en parada cardiorrespiratoria y solo hizo la reanimación cardiopulmonar a una de las chicas, sin usar el desfibrilador. Las otras dos también fueron llevadas al botiquín pero no fueron atendidas inmediatamente. Finalmente, fueron los técnicos del Samur los que les realizaron las maniobras de RCP correspondientes, sin éxito. Tres de las cinco chicas (Rocío Oña, Cristina Arce y Katia Esteban) murieron en Madrid Arena. Las otras dos (Belén Langdon, de 17 años, y María Teresa Alonso), en el hospital, a causa de las heridas sufridas.
Las consecuencias.
-El caso Madrid Arena hirió de muerte el Gobierno municipal de Ana Botella. A pesar de no ser imputados, dimitieron el vicealcalde, Miguel Ángel Villanueva (relacionado en algunas informaciones periodísticas con Flores), y el concejal Pedro Calvo, presidente no ejecutivo de Madridec, aunque éste mantuvo su acta de concejal por el PP. También cesó de su cargo tras ser imputado el delegado de Seguridad, Antonio De Guindos, a pesar de que luego se le retiró la acusación. Idéntica actitud tomó el entonces jefe de Policía, Emilio Monteagudo, tras ser imputado por el juez. Fue imputada durante un tiempo la concejala de Seguridad, Fátima Núñez, y cayó la cúpula de Madrid Espacios y Congresos por presuntos contratos preferentes hacia Seguriber y DivierTT.
- La imagen pública de la alcaldesa, Ana Botella, resultó gravemente afectada ya que, durante la gestión de la crisis, no canceló un viaje a un 'spa' en Portugal para pasar unos días de fiesta con su familia.
- El Ayuntamiento de Madrid anunció, tras una comisión de investigación que exoneró al Gobierno de responsabilidad política, que tomaría importantes medidas de seguridad en relación a los controles de accesos, iniciando obras en varios recintos municipales abiertos al público y obligando a las empresas a incorporar al Samur a los eventos. Asimismo, anunció modificaciones en los controles de Madrid Arena que se llevaron a cabo en septiembre de 2015, ya con Manuela Carmena en el Consistorio.
- Un acta policial denunció que Madrid Arena carecía de licencia desde 2006 e incumplía la normativa antiincendios, algo que fue contrarrestado por el Consistorio con el argumento de que cumplía con la Ley regional del Suelo, que permite a los ayuntamientos no pedir licencia para sí mismos.
El juicio.
El juicio comienza este martes en la sala 0 de la Audiencia Provincial tras dos años de instrucción, y durará entre cinco y seis meses, con tres sesiones semanales. En la primera sesión, se tratarán las cuestiones técnicas previas. Hasta el 4 de febrero se realizarán los interrogatorios a los 15 acusados. Posteriormente, declararán en la prueba testifical 16 familiares de las víctimas, 30 lesionados, 21 asistentes al evento que no sufrieron lesiones, 13 policías nacionales y 15 agentes municipales. Esta última fase se realizará en la sección séptima de la Audiencia Provincial.
Los acusados.
- Miguel Ángel Flores, promotor del festejo a través de la empresa DivierTT. Para él se solicitan cuatro años de cárcel por homicidio imprudente grave y 16 delitos de lesiones por imprudencia grave, así como su inhabilitación durante 6 años.
- Santiago Rojo Buendía, segundo responsable de la organización del evento, de DivierTT.
- Miguel Ángel Morcillo Pedregal, tercer responsable de la organización y encargado de las barras.
- Simón Viñals, responsable de la enfermería.
- Carlos Viñals, responsable de la enfermería.
- Emilio Monteagudo, jefe de la Policía Municipal de Madrid.
- Carlos Manzanares, socio mayoritario y apoderado de Kontrol 34, empresa contratada a cargo de la seguridad interna del evento.
- Emilio Belliard, socio y propietario de Kontrol 34.
- Francisco del Amo, coordinador de proyectos de Madrid Espacios y Congresos, empresa municipal propietaria de Madrid Arena.
- Rafael Pastor, director de seguridad y emergencias de Madrid Espacios y Congresos.
- José Ruiz Ayuso, jefe de emergencias y supervisor del evento por Madrid Espacios y Congresos.
- José Antonio Díaz Romero, jefe de equipo de Seguriber, empresa encargada del acceso al recinto.
- Raúl Monterde, jefe de equipo de Seguriber y responsable de la requisa de objetos peligrosos.
- Roberto Mateos, responsable de las cámaras de seguridad y emergencias en el evento de Seguriber.
- Juan José París, coordinador de seguridad y encargado de controlar los accesos y equisas de elementos peligrosos de Seguriber.