Además, los empresarios de Madrid han solicitado que se exija el estricto cumplimiento de la ley a todas las entidades que aspiren a operar en el sector del transporte prestando un servicio público. CEIM ha asegurado que las actividades de transporte que, "bajo la denominada economía o consumo colaborativo, se desarrollan a través de determinadas
plataformas de Internet y aplicaciones para telefonía móvil, no reúnen los
requisitos legales para prestar un servicio de transporte público".
Además, la Confederación Empresarial de Madrid ha destacado que estas plataformas "no garantizan el
cumplimiento de las condiciones de calidad y seguridad que la normativa exige a
los profesionales del taxi y del autobús y, tampoco, aportan ninguna novedad
tecnológica que las diferencie de las que ya ofrece el sector del transporte
que legítimamente opera en el mercado". En este sentido, CEIM ha explicado que "actúan con ánimo de
lucro sin que exista ningún control sobre las mismas, lo que contribuye no solo
a incrementar la economía sumergida, sino a generar un agravio comparativo con
otros empresarios que cumplen con la normativa, con sus obligaciones
tributarias y con la Seguridad Social".
Por ello, la Confederación Empresarial de Madrid ha insistido en la necesidad de
fomentar una "competencia leal que proteja a los consumidores, apoye la
innovación, garantice la calidad de servicio al cliente y fomente la
competitividad del sector del transporte público".
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