Cuidados palitivos vs. eutanasia: un debate apasionante para todos los que defendemos la vida, el derecho a la vida de las personas, de todas y cada una de las personas, desde su concepción hasta su muerte natural. Para todos los que decimos No a cualquier actuación de eutanasia directa o encubierta y decimos sí a reconocer y a atender el derecho de cada persona a vivir dignamente hasta el final de su vida y en el final de su vida.
La semana pasada se celebró en Madrid, en el Congreso de los Diputados, un seminario internacional sobre este tema, una jornada patrocinada por las organizaciones Familia y Dignidad Humana, One Of Us, Valores y Sociedad, Political Network for Values y Jerome Lejeune, que se celebró con éxito de público y participantes y que contó con ponentes de excepción de países donde la eutanasia o el suicidio asistido son ya una triste realidad.
Las experiencias de Holanda, Luxemburgo, Canadá, Bélgica, Colombia, Suiza, Alemania y algunos estados de EEUU, los pasos dados en países como México y Uruguay, y los debates abiertos en Finlandia, España, Portugal, e Italia se analizaron en Madrid.
El Congreso de los Diputados rechazó a principios de 2017 el debate de una proposición de ley sobre la eutanasia, pero tiene abierto un debate sobre los cuidados paliativos y el final de la vida, similar a los procesos legislativos abiertos en las diferentes comunidades
En Madrid la Asamblea aprobó por unanimidad la Ley 4/17 de 9 de marzo de los derechos y garantías de las personas en el proceso de morir que puede servir de ejemplo para la ley nacional
Es importante resaltar el nombre definitivo de la ley “Ley de derechos y garantías de las personas en el proceso de morir” ya en el título se delimita y circunscribe de forma clara el alcance de esta ley, será de aplicación a las personas que hayan iniciado su proceso de morir, a las que tengan ya su muerte próxima, pero no se aplicará antes de que hayan empezado a morir.
La ley de Madrid defiende el derecho a la vida, considera la muerte como una proceso natural y recoge con claridad los elementos imprescindibles para que se puedan garantizar los derechos y las garantías de las personas en su proceso de morir, el derecho al tratamiento integral de los síntomas que causan el sufrimiento, al acceso a los cuidados paliativos integrales y de calidad, al acompañamiento familiar y a la intimidad, a sus creencias y valores y el respeto a la libertad, la autonomía y la voluntad de la persona siempre que no contradiga el ordenamiento jurídico y la lex artis
Cuando no se puede “curar” sigue siendo necesario “cuidar”. Los cuidados paliativos se han convertido en una herramienta básica para garantizar la dignidad de la persona en todos los momentos de su vida, hasta el final de su vida y en el final de su vida. Los buenos cuidados paliativos obvian la eutanasia, o dicho de otra manera, la falta de unos buenos cuidados paliativos integrales y de calidad, abre un debate sobre el dolor y el sufrimiento que puede derivar en eutanasia y suicidio asistido cuando de lo que se trata, y lo que deben garantizar la ley y los servicios sanitarios, son derechos y garantías para que se trate el sufrimiento y se garantice a las personas y sus familias los cuidados sanitarios y sociales que les acompañen hasta el final.
Madrid cuenta con unos Cuidados Paliativos que nos permiten cumplir la ley y cuidar a todos los madrileños con los derechos y garantías que se merecen en el final de su vida. La Sanidad de Madrid cuenta con un programa específico y una Unidad de Coordinación Regional de Cuidados Paliativos, 430 centros de Atención Primaria, 35 hospitales, una importante red de Urgencias y una Unidad de atención paliativa continuada Pal 24 (365 días al año, 24 horas al día, para pacientes, cuidadores y profesionales), 16 equipos específicos de soporte de atención domiciliaria y 27 de soporte hospitalario, una Unidad atención integral paliativa pediátrica, 300 camas de hospitalización específicas de cuidados paliativos, unidades de media estancia, unidades de cuidados paliativos para pacientes en situación compleja y aguda y 546 profesionales con dedicación exclusiva a los cuidados paliativos (médicos, profesionales de enfermería, psicólogos, técnicos auxiliares, trabajadores sociales y otros)
La Comunidad de Madrid está también pendiente de humanizar la asistencia sanitaria y de atender y cuidar a todos los pacientes, siempre, en todo momento, pero muy especialmente en los procesos críticos como es la llegada de la muerte. La humanización de la Sanidad se ha convertido en un eje transversal y estratégico de todas las actuaciones de Sanidad, también en cuidados paliativos.
Pero hablando de humanización, la ley madrileña también recoge el derecho a la intimidad, a la atención espiritual, al acompañamiento y al reconocimiento de la familia como parte receptora de los cuidados y su derecho a recibir atención durante el período del duelo…..
En Madrid estamos preparados y dispuestos para ofrecer una atención sanitaria completa, para garantizar las garantías y los derechos de las personas en su proceso de morir y para soslayar la eutanasia y el suicidio asistido.
Como diría Shakespeare, “antes de herir, siente. Antes de rendirte, intenta. Antes de morir, vive”
Regina Plañiol es diputada del PP en la Asamblea de Madrid