Este viernes el secretario general de Manos Limpias, Miguel Bernard, ha sido detenido en Madrid por la Policía Nacional en una operación desplegada contra este sindicato y contra la Asociación de Usuarios de Banca (Ausbanc), cuyo presidente también ha sido arrestado, por extorsionar presuntamente a entidades bancarias a cambio de no iniciar causas judiciales contra ellas.
En la operación también se ha detenido al director de comunicación de Manos Limpias, Francisco Castro Villacañas, y a otras nueve personas. Tanto la Policía Nacional como la Fiscalía de la Audiencia Nacional llevan meses investigando varias denuncias presentadas contra Ausbanc por extorsión a la vez que indagaban sobre la participación de Manos Limpias en la trama. Los investigadores calculan que se alcanzaron sumas millonarias de dinero.
Fuentes de la investigación han indicado que las pesquisas se encuentran muy avanzadas por la parte de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional y han sido coordinadas por Santiago Pedraz, juez central de Instrucción Número uno de la Audiencia Nacional. Asimismo, han apuntado a que la actividad por la que se acusa a Manos Limpias y a Ausbanc consiste básicamente en exigir pagos a las entidades bancarias extorsionadas a cambio de no difundir informaciones negativas sobre ellas o incluso iniciar causas judiciales. También han indicado que tanto Luis Pineda, presidente de Ausbanc, como Miguel Bernard mantienen una amistad desde hace años.
De este modo, la Policía Nacional investiga sus actividades desde hace un año, justo después de recibir la denuncia por parte de extrabajadores de entidades bancarias que sufrieron el acoso de la trama.
Cobro de extorsiones
La trama llegó a llevar presuntamente a alguna entidad bancaria hasta los tribunales, donde una vez iniciada la acusación se retiraban de la causa alegando darse por satisfechos con las explicaciones ofrecidas por sus víctimas. Según los responsables de la investigación, "retiraban repentinamente la acusación porque ya habían cobrado la extorsión".
Estos supuestos chantajes comenzaron exigiendo a las entidades que se suscribieran a la revista con la que cuenta Ausbanc, que tiene una periodicidad mensual y se centra en informaciones del mundo de la económica y la empresa. El siguiente paso fue exigir sumas de dinero a cambio de no difundir información negativa, y el tercero era llevarlas a los tribunales y amenazarlas con airear las causas en los medios de comunicación.
Extorsiones de tres millones de euros
Según las pesquisas policiales, algunos casos concretos han gozado de gran repercusión mediática en los últimos años y han averiguado que en una ocasión la trama llegó presuntamente a exigir el pago de hasta tres millones de euros a cambio de retirar una acusación en los tribunales.
La Asociación de Usuarios de Servicios Bancarios, Ausbanc, se presenta en internet como una entidad española privada constituida en 1986 bajo el eslogan "lucha por tu dinero" y cuenta con más de cien abogados repartidos en 30 oficinas ubicadas en distintas comunidades autónomas. Sin embargo, la investigación de la Guardia Civil ha revelado que en realidad se trataba de una organización diseñada para que sus responsables obtuvieran grandes beneficios utilizando como pantalla la protección de los usuarios de banca. Para reforzar la presión sobre las entidades financieras, Ausbanc utilizaba al sindicato Manos Limpias, al que también financiaba, como acusación popular. Manos Limpias tambien ha ejercido la acusación en multitud de casos, como el 'caso Noos', en el que su actuación permitió que la Infanta Cristina se sentase en el banquillo de los acusados.