Las obras, con una inversión total de 348.185 euros, fueron inauguradas este lunes por del director general de Cooperación con la Administración Local, Jaime González Taboada, y la alcaldesa de la localidad, Lucila Toledo. La reforma del casco urbano ha incluido la urbanización de las calles Estanco y Vega en la parte baja del municipio y Monte y Pinar en la parte alta. Los trabajos han incluido la construcción de una nueva red de alumbrado público, electricidad y telefonía soterrada.
Además, se han suprimido barreras arquitectónicas en todos los trazados y el mobiliario urbano cumplirá lo dispuesto por la Ley de promoción de la accesibilidad y supresión de barreras arquitectónicas. En algunos casos se han llevado a cabo también reparaciones de saneamiento, especialmente en la evacuación de aguas pluviales.
Esta obra se ha realizado a través del Plan de Cooperación municipal con una inversión de 275.725 euros de los cuales la Comunidad de Madrid aporta del 45 por ciento, el Ayuntamiento de la localidad aporta un 5 por ciento y el Estado el resto.
En el caso de las dos áreas ecológicas con contenedores de residuos sólidos urbanos soterrados, el objetivo era retirar los contenedores de las calles y plazas más emblemáticas del pueblo. En el caso de la nueva zona verde, situada en la calle Carlos Ruiz, los trabajos han permitido crear un espacio para el disfrute de los vecinos en el que se han instalado nuevas farolas, bancos, papeleras y diversos elementos de jardinería.
Estas dos obras se han ejecutado a cargo del las ayudas que concede la dirección General de Cooperación con la Administración Local que depende de la Consejería de Presidencia e Interior para la creación de zonas verdes y embellecimiento de cascos urbanos, así como de prestación de servicios municipales.