Los Reyes Magos quisieron enviar un mensaje de paz a una ciudad "dispuesta a levantarse contra la barbarie". Hicieron saber a niños y mayores que "Jesús vino al mundo para que todos vivieramos en paz", pero que para llegar "esta meta que hoy parece inalcanzable hay que trabajar mucho". Sus Majestades saben que "Madrid es una ciudad de luz, vitalidad y entusiasmo", y que con el esfuerzo de todos la paz llegará.
Además, Melchor hizo hincapié en la importancia de que todos los pueblos del mundo se unan. "Venimos de países y lugares lejanos (..) y el Madrid que vemos es una ciudad construida día a día por manos de todas las razas ", asique, siguiendo las palabras de los Reyes "todos los pueblos debenabrazarse" para hacer de el mundo un lugar mejor.