Pregunta. Acaba de ser elegido diputado en el Congreso, ¿por qué da el salto después de 22 años en la política regional?
Respuesta. Me ilusionaba ser diputado en el Congreso. A mí me gusta el parlamento, porque es el lugar donde la política tiene su máxima expresión. Además, consideraba que era el momento de buscar una nueva actividad. Si, además, como ha sucedido, los compañeros me eligen, estoy encantado de formar parte de la lista que encabeza el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Han sido un cúmulo de factores los que me llevan a dar este paso, aunque eso no supone que vaya a olvidar mi función como secretario general de los socialistas madrileños, no voy a restar ni un solo segundo de dedicación y de entrega.
P. No es habitual que un barón socialista sea diputado, ¿eso le resta o le suma legitimidad?
R. Ni suma ni resta. Quizás sea el único barón que no es candidato, pero en mi campaña de primarias repetí hasta la saciedad que yo aspiraba a ser secretario general no para ser candidato, sino para intentar hacer ganar elecciones al partido. Era casi mi obsesión y vamos por el buen camino. Hemos conseguido hacerlo el 28-A tras 33 años.
P. A la vista está que el miedo a Vox ha movilizado a la izquierda en las generales, ¿se activará ese factor en las municipales y autonómicas?
R. El fenómeno sigue ahí y da más valor a nuestra victoria el 28-A porque Madrid es la cuna de Vox. Con lo cual, el discurso que era válido para las generales lo sigue siendo para las autonómicas y municipales. Otra cosa es que, si los votos y los escaños dan, las derechas decidan sumar con Vox, pero la amenaza sigue latente. La participación de las personas que votan a partidos constitucionalistas es vital.
P. Otro factor activado por Pedro Sánchez fue el del voto útil. Entiendo que Ángel Gabilondo puede apostar por ello, pero no sé si Pepu Hernández está en condiciones compitiendo contra Manuela Carmena.
R. Todo voto al PSOE es útil. Somos la única izquierda sensata que puede gobernar. No vamos con propuestas mágicas ni tenemos solución a todos los problemas, simplemente queremos mejorar. No vamos a negar que tenemos un metro a nivel de cualquier capital europea, pero hay que gestionarlo mejor. La Sanidad también es buena, pero sus dirigentes han desviado fondos públicos a la privada. No tenemos recetas mágicas pero sí mucha voluntad para mejorar la vida de los madrileños y eliminar esta desigualdad tremenda.
P. Hablaba de que Pepu debe hacer propuestas diferentes a las de la alcaldesa. ¿Nos puede avanzar alguna?
R. Sería desleal que yo las avance cuando lo hará él en los próximos días. Nuestro proyecto es de equipo, está respaldado por un partido que lleva más de 140 años luchando por las libertades, un partido artífice de la Constitución del 78... Nuestro proyecto es colectivo y no personalista y eso nos diferencia bastante de otras fuerzas que, hipotéticamente, están a nuestra izquierda.
P. Es posible que a Gabilondo le den los números pactando con Ciudadanos, igual que a Sánchez en el Congreso. ¿Abogaría por eso?
R. No descartamos a nadie. Si las propuestas de nuestro programa coinciden en lo esencial con otra fuerza política constitucionalista, no la vetaremos. Hablaremos con todos, aunque primero vamos a construir una mayoría bastante amplia.
P. Pero han estado cuatro años compartiendo la Asamblea con Ciudadanos y casi les han llegado a llamar golpistas.
R. Hace poco hemos visto cómo el expresidente Garrido, que llamó populistas a Ciudadanos, ha pasado a engrosar sus filas. Nosotros vamos a ser coherentes porque no hemos insultado a nadie. Hemos hecho una oposición seria con propuestas como que la salud bucodental esté en la Sanidad pública u otras relacionadas con la muerte digna. Tenemos la suficiente tranquilidad y responsabilidad como para seguir esa línea de trabajo y de propuestas. Los que quieran sumarse, se sumarán.
P. ¿Pueden marcar los pactos en el Congreso a los de las demás cámaras políticas?
R. Ya veremos, primero hemos de constituir el Congreso, aunque no tiene por qué reproducirse miméticamente lo que pase a nivel nacional en otros territorios.
Franco, en La Terraza de Gran Vía
En su visita a la redacción de Madridiario, Franco también ha aprovechado para sentarse junto a Constantino Mediavilla, presidente editor de Madridiario, en La Terraza de Gran Vía. Allí, ha repasado los "debates vivos" que han caracterizado los últimos años del PSOE-M y que él ha tratado de apaciguar: "El debate ha generado muchísimas divisiones y yo he intentado que esa integración sea real".
Así, se ha mostrado confiando de que, una vez solucionado eso, puedan volver a ganar las elecciones autonómicas como lo han hecho en las generales. Después, llegarán unos pactos para los que mira más a su izquierda, aunque prefiere tener una mayoría suficiente.
Sobre el papel de Pepu, defiende el nombramiento del ungido de Sánchez, se muestra convencido de que logrará "un gran resultado" y espera que las propuestas del PSOE no se las vuelva a apropiar Manuela Carmena.