El actual presidente del Gobierno autonómico ha querido restar importancia a la presencia de Garrido en la Fiesta del Dos de Mayo que se celebra en la Puerta del Sol. Pedro Rollán ha preferido destacar en su discurso a los premiados con las Medallas de la Comunidad de Madrid y con la Cruz de la Orden Dos de Mayo y se ha centrado en remarcar la forma autóctona de entender el autogobierno frente a otras autonomías como Cataluña. "Los madrileños debemos sentirnos orgullosos de ser un pilar vertebrador del Estado y un fiel apoyo de la Nación española", sentenció.
Raphael, el llamado "héroe del monopatín", o la selección de fútbol femenino sub-17 eran los protagonistas, pero el centro de atención no estaba en el escenario. En el patio central de la Real Casa de Correos los focos se centraban en la plantilla de invitados: Ángel Garrido volvía a la Puerta del Sol como expresidente de la Comunidad, pero esta vez, forma parte de la lista de Ciudadanos.
Allí se enfrentó a la frialdad del presidente del PP, Pablo Casado, que no quiso saludarle. Su sucesor, Pedro Rollán, en cambio, hizo lo posible por restar importancia a la cuestión. En su discurso no solo destacó la valía de los premiados, sino que aprovechó para lanzar un mensaje velado a los votantes para que teman a quienes "quieren debilitar, silenciar, dividir o instrumentalizar a España, vengan de donde vengan", es decir, a los independentistas que necesita Pedro Sánchez para poder formar Gobierno tras las elecciones generales del 28-A.
Rollán centró su discurso en hacer frente al independentismo, cuyos apoyos necesita Sánchez para gobernar
"Es nuestro deber y compromiso permanecer alerta ante cualquier intento de socavar la unidad nacional, ya sea por intereses partidistas, ideológicos o personales", sentenció. Y puso a Madrid como muestra de cómo debe entenderse el Estado de las Autonomías. "El autogobierno de la Comunidad de Madrid es eficacia, solidaridad y lealtad a España", apostilló. Con la defensa de la Constitución como hilo conductor de su intervención, Rollán valoró que "los valores que inspiraron el levantamiento de Dos de Mayo -el apoyo a las víctimas de la injusticia, la búsqueda de la libertad o la solidaridad entre compatriotas- siguen alentando los valores constitucionales que hoy rigen nuestra convivencia".
El actual presidente solo hizo una breve referencia a su interinidad para reivindicar su cargo como garantía de "la normal continuidad entre mandatos de nuestro autogobierno". "Lo importante es la existencia de unas instituciones autonómicas muy consolidadas -la Asamblea y el Gobierno- junto a una Administración regional que trabaja todos los días para dar respuesta a las necesidades y expectativas de la ciudadanía", continuó.
"Somos los políticos quienes debemos servir a la sociedad y nunca al contrario", sentenció. Y por si quedaba alguna duda de dónde quería centrar la atención Rollán en el Día de la Comunidad, apostilló: "Quiero dedicar este Dos de Mayo a los madrileños que cada día se esfuerzan y dan lo mejor de sí para hacer una Comunidad de Madrid más próspera y avanzada". "Ellos son los verdaderos y principales protagonistas de este día y de nuestra región", concluyó.
Garrido y Aguirre, juntos
Garrido le escuchó desde la tribuna de invitados, sentado al lado de Esperanza Aguirre por razones de protocolo (ambos son expresidentes de la Comunidad). Fue una de las fotos de la mañana, pero también la curiosa distribución de asientos de los candidatos a la Asamblea. Íñigo Errejón (Más Madrid) estaba sentado entre Rocío Monasterio (Vox) e Isabel Díaz Ayuso (PP). A continuación se encontraban Ignacio Aguado (Ciudadanos) y Ángel Gabilondo (PSOE), que viven una permanente batalla por el veto del primero a gobernar con el segundo si así lo permiten las elecciones del 26 de mayo y que estaban separados por Clara Serra, número dos de Más Madrid. Su hermana, Isa Serra, líder de Unidas Podemos, decidió no acudir a la Fiesta del Dos de Mayo, aunque sí tiene previsto presentar el programa de la formación esta tarde.
Raphael, Gregorio Marañón e Ignacio Echevarría, Medallas de Oro
Los premiados con las Medallas de la Comunidad y la Cruz de la Orden Dos de Mayo recibieron su galardón de manos de Rollán en un acto que terminó con la Orquesta y Coro de la Comunidad interpretando fragmentos de La verbena de la Paloma, Don Manolito y El año pasado por agua, antes de que las autoridades salieran a la plaza para presenciar el desfile cívico militar de todos los años.
De ellos, solo Gregorio Marañón -presidente del Patronato del Teatro Real- y Raphael, ambos Medalla de Oro, tuvieron una breve intervención en el evento en el que agradecieron el reconocimiento. El cantante -que fue Premio Madrid Toda una Vida en 2017- fue uno de los más aplaudidos por el público, pero no el único. Ana Millares, madre de Ignacio Echevarría -e llamado "héroe del monopatín" que fue víctima de un atentado terrorista en Londres recogió la Medalla de Oro a título póstumo de su hijo.
Entre las demás condecoraciones, fue la selección de fútbol femenina sub-17, cuyas jugadoras acudieron vestidas con su uniforme correspondiente, la que recibió el mayor aplauso del público. Junto a ellas, también recibieron la Medalla de Plata de la Comunidad la actriz Ana Álvarez Wagener, Plena Inclusión Madrid y Cermi-Madrid.
Por su parte, la Orden del Dos de Mayo entregó dos placas a la Metro de Madrid -también Premio Madrid de Movilidad este año- y a la Estrategia Madrid por el Empleo, que fue recogido por el presidente de la CEIM, Juan Pablo Lázaro, y los líderes sindicales Jaime Cedrún (CCOO) y Luis Miguel López Reillo (UGT).
La escritora Elvira Sastre y la chef Samantha Vallejo-Nájera recibieron una Encomienda, mientras que el director general de El Corte Inglés, Arsenio de la Vega Martín de los Santos, recogió la placa de la Gran Cruz de la Orden del 2 de mayo por ser una "institución del comercio arragaida en la Comunidad desde hace 80 años".
Por último, la Gran Cruz de la Orden Dos de Mayo fue otorgada a Fuencisla Clemares Sempere, directora general de Google en España y Portugal, "por su implicación a favor de la igualdad real entre hombres y mujeres en el mundo de la empresa".