Según explicaron a Madridiario varios responsables y trabajadores de los establecimientos de hostelería de los alrededores de este espacio de esparcimiento, el Ayuntamiento de Madrid informó a los adjudicatarios en el mes de marzo de la intención de realizar trabajos de reparación en el vaso del lago.
Estos trabajos coincidirán en 2017 con la extinción de los contratos de explotación de los restaurantes, que se producirá en el mes de febrero, aspecto que los empresarios conocen y han dialogado con el Ayuntamiento. Fuentes del Consistorio explicaron a este periódico digital que se ha calendarizado el proceso de rehabilitación del ámbito para que no afecte a los establecimientos. De tal forma que se ha dado una moratoria a los adjudicatarios de seis meses para que puedan operar durante la temporada alta, ya que ya tienen reservados eventos para esta primavera y este verano. En principio, está previsto que las obras comiencen en el mes de octubre, período en que, presumiblemente, se sacaría de nuevo a concurso la gestión de estos espacios por otros diez años.