Los datos del Ministerio de Empleo no mienten: los madrileños que quieren montar su propio negocio no dudan en comenzar a pagar sus cuotas como autónomo y embarcarse en una aventura empresarial. Los datos recogidos durante el último cuatrimestre de 2016 revelan que de los 383.314 afiliados por cuenta propia a la Seguridad Social en Madrid, 230.954 no están integrados en sociedades mercantiles, cooperativas u otras entidades, lo que se traduce en que para la mayoría de los emprendedores madrileños no hay vida más allá del autónomo.
Y sin embargo, desde hace unos años está resurgiendo un concepto que fue muy recurrente a principios del siglo XX: la economía social. Popularmente conocida como el Tercer Sector -no son empresas públicas, pero tampoco tienen la ambición de lucrarse como ocurre en el libremercado-, ha sido el motor silencioso de la economía laboral madrileña hasta hoy. Podría decirse que son negocios en los que priman las personas por encima del capital y tienen un claro compromiso con el desarrollo local. Pueden conformarse como cooperativas, mutualidades, sociedades laborales y otras tantas posibilidades más. En Europa el ejemplo más claro reside en el cooperativismo agroalimentario, pero es factible la inclusión de casi cualquier idea dentro de este modelo, lo importante es el enfoque.
La llegada de Ahora Madrid al Ayuntamiento de la capital ha supuesto un giro de 180 grados a las tradicionales herramientas económicas que se ofrecían a los ciudadanos con pretensiones de levantar un nuevo negocio. Y aunque el Ejecutivo municipal no reniega de los estándartes habituales, como las sociedades anónimas, el Consistorio está impulsando los nuevos modelos de negocio sostenible por primera vez en la historia del Consistorio capitalino.
Uno de los grandes dilemas a la hora de lanzarse al mercado laboral como freelance reside en la búsqueda de financiación. En la actualidad, el amplio abanico de créditos y préstamos bancarios lleva a los proyectos de empresarios a las puerta de los bancos y entidades de crédito; pero el primer mazazo llega a la hora de demostrar suficiente solvencia económica propia o la de encontrar un `alma cándida´ que avale el proyecto.
El Ayuntamiento que lidera Manuela Carmena ha cogido carrerilla a la hora de firmar convenios con entidades financieras éticas; y aunque en este caso parezca que financieras y éticas supone contradecir axiomas, lo cierto es que todo aquel con una buena idea, dispuesto a embarcarse en la aventura de emprender y a organizarse para ello como una entidad social –cooperativas, sociedades laborales, mutualidades, empresas de inserción, etc- y con un proyecto que impulse la economía social, tiene la posibilidad de conseguir un buen “pellizco” del millón y medio de euros que va a destinar el Consistorio municipal a través de su política de refuerzo a este Tercer Sector hasta el fin de la lesgislatura.
Facilitar financiación a empresas de economía social
Sólo este año se van a asignar 450.000 euros para conceder subvenciones a negocios madrileños de estas características (hasta 5.000 euros para cada uno de ellos) a través de la línea de convocatorias de subvenciones abiertas.
Además de convenios de financiación preferente con los bancos –Bankia e Ibercaja-, se han firmado documentos con entidades financieramente sostenibles -Laboral Kutxa, Coop57, Triodos Bank, Fiare Banca Ética- para que se financie una parte de las nuevas aportaciones a capital social para todos los socios de una cooperativa o sociedad laboral con su sede social o actividad en Madrid.
Y la lista no acaba ahí, hace menos de un mes se conoció que el área de Economía y Hacienda suscribió un acuerdo con la sociedad avalista Elkargi, como reconoce Bernardino Sanz, el director de Economía y Sector Público del Ayuntamiento de Madrid: “Hemos aportado un millón de euros para que proyectos que no tienen garantías por sí mismos soliciten un aval a este banco y, si el proyecto es viable, se concede”. Con ese 1.040.932 euros el Consistorio municipal entró en capital social de esta Sociedad de Garantía Reciproca posibilitando así avalar operaciones por 26.000.000 de euros. De este modo, se evita la incertidumbre económica de muchos familiares y amigos que temen quedarse sin la casa, el coche o el plan de pensiones que se ofrecen como garantía a los bancos que financian el negocio.
Nadando en MARES de ayudas e información
En el año 2015, Spain Startup facilitó el balance de la esperanza de vida de las empresas emergentes que se creaban en España y los datos no eran muy esperanzadores: nueve de cada diez no supera los tres años de vida. Pero más allá de las estadísticas, uno de los motivos que más peso tiene para la muerte prematura de un negocio es la falta de análisis del mercado y el tratar de imitar modelos de negocio ya existentes sin adaptarlos a las realidades del público objetivo. En resumen, una falta de planificación `de libro´.
Para eso también hay soluciones. Existe un proyecto que aún no ha tenido mucha difusión entre los madrileños porque continúa en proceso de construcción llamado MARES. Se trata de una iniciativa municipal y civil que ha financiado la Unión Europea con casi 5 millones de euros y que, entre otras cosas, va a proporcionar espacios a los ciudadanos donde aprender, conectar ideas y dar salida a los proyectos del Tercer Sector.
Este mes se realiza lo que podría denominarse como el “anteproyecto” de lo que serán el día de mañana los laboratorios de aprendizaje. Los talleres de Mapeo que van a tener lugar en los distritos se encargan de ayudar a identificar proyectos ya existentes, además de todas aquellas ideas e iniciativas surgidas de la ciudadanía susceptibles de convertirse en proyectos de autoempleo. Y así lo transmite Sanz: “Lo que se hará en este marco será acompañarles, asesorarles y ponerles en contacto con otras iniciativas sociales que ya están funcionando en ese mismo campo, además de relacionarles con las oportunidades de mercado existentes”.
Villaverde, Vallecas, Vicálvaro y Centro son los distritos elegidos para albergar los espacios iniciales, que serán una especie de laboratorios para emprendedores, en los que se van a desarrollar todas las acciones necesarias para desarrollar sus proyectos
Muchos de los proyectos que ya se han presentado tienen un potencial enorme. MARES será el encargado de encauzar e impulsar estas ideas. Por su parte, al Ayuntamiento de Madrid le corresponde la tarea de proporcionar cierta viabilidad económica con instrumentos como las subvenciones.