La nueva alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha propuesto al cantante Raphael que dirija el área de Las Artes del Ayuntamiento de Madrid en el nuevo gobierno de la ciudad, según ha podido saber Madridiario.
A falta de conocer al resto de los miembros del equipo que gobernará la capital durante los próximos años, este miércoles se confirma la incorporación de Rafael Martos, más conocido como Raphael, como delegado de Las Artes del Ayuntamiento de Madrid.
Fuentes solventes han confirmado a este digital que el cantante recibió una llamada de la nueva alcaldesa, Ana Botella, en la tarde del martes, pocas horas después de
tomar posesión de su nuevo cargo en el Consistorio. Según indican las mismas fuentes, el cantante habría aceptado el encargo.
Raphael se convertirá así —a pesar de no haberse presentado a las elecciones en las listas del PP— en el próximo delegado de Las Artes, en sustitución de Alicia Moreno. Por el momento se desconoce si Moreno pasará a hacerse cargo de otra área municipal o abandonará la Junta de Gobierno. En cuanto al cantante, las mismas fuentes no han precisado si abandonará su carrera artística, aunque
en su web oficial, por el momento, continúan en pie los dos conciertos que tiene programados para febrero en el Auditorio Nacional de México DF.
Madrileño de adopción
Aunque es natural de Linares (Jaén), Raphael se trasladó a Madrid cuando tenía cuatro años. Su carrera como cantante arrancó en 1962, fecha en la que ganó el festival de Benidorm.
A partir de ahí comenzaría una larga trayectoria artística que le llevaría por todo el mundo, llegando incluso a representar a España dos años seguidos en el festival de Eurovisión.
En Madrid ha subido prácticamente a todos los escenarios principales, incluido el estadio Santiago Bernabéu, donde celebró un concierto especial por el XXV aniversario de su carrera. Recientemente fue
galardonado por la Confederación del Comercio Minorista, Autónomos y de Servicios de la Comunidad de Madrid (CECOMA) por su dilatada carrera.
Además, en 2010 fue el
pregonero de las fiestas de San Isidro, con un discurso que terminó con unas palabras casi proféticas: "Por orden del señor alcalde..."